Una barrera menos

Ayer, daba comienzo la II Edición de este título, FEVIDA. Ayer todo fue muy diferente a esa primera vez, y estuvo todo muy normalizado, con mucha más calma, y de forma más natural. Las personas con Síndrome de Down y otras discapacidades intelectuales que cursarán en este título, conocían a lo que iban, estaban contagiados por sus compañeros de la pasada edición, y así mostraron sus ganas e interés desde que decidieron inscribirse en este programa y superar el acceso para convertirse en alumnado universitario.

Hace exactamente un año se conquistó la Educación Superior. Un grupo de personas con discapacidad intelectual empezaba su andadura en la Universidad Pablo de Olavide para cursar un título propio: “Formación para el Empleo y la Vida Autónoma”.

A los hechos nos podemos remitir, y esa accion innovadora que reconocía a la persona el derecho a una educación universal y de calidad, cumplió el desarrollo del programa con éxito y ha dejado un antes y un después en la Universidad, en las personas tituladas y en sus familias.

Ayer, daba comienzo la II Edición de este título, FEVIDA. Ayer todo fue muy diferente a esa primera vez, y estuvo todo muy normalizado, con mucha más calma, y de forma más natural. Las personas con Síndrome de Down y otras discapacidades intelectuales que cursarán en este título, conocían a lo que iban, estaban contagiados por sus compañeros de la pasada edición, y así mostraron sus ganas e interés desde que decidieron inscribirse en este programa y superar el acceso para convertirse en alumnado universitario.

Gracias al apoyo del equipo docente que los acompaña en esta experiencia, podemos afirmar que cada  alumno/a se hace con un “traje a medida”, sin olvidar los parámetros establecidos en el programa como norma.

Al finalizar este curso, contaremos con más chicos y chicas con discapacidad intelectual que poseen titulación universitaria, dispondrán de nuevos contenidos y objetivos alcanzados, y sobre todo contarán con nuevas herramientas que les ayudarán a labrar su futuro profesional, y sobretodo su futuro personal.

Sólo nos queda seguir asentando las bases y luchar como institución para que se consoliden este tipo de experiencias, y como no, desear el mejor de los éxitos a cada una de las 17 personas que atraviesan una puerta que les muestra un futuro muy esperanzador, que confía en sus capacidades y que huye de las etiquetas.

José Manuel Hermida
Director Técnico