Desde que estuve en el colegio por primera vez a los 4 años lo que recuerdo es que estaba en una guardería con muchos niñ@s yo disfrutaba de las clases por que creo recordar que hicimos algunos juegos divertidos pero otras veces estuvimos trabajando y atendiendo a los profes.
A los 6 años entré en primaria, aunque era muy tímida no podía hacerme amigos fácilmente pero había unos pocos niños y niñas que tenía ganas de hablar conmigo, yo por una parte estaba diciéndome a mi misma: Tierra trágame y por la otra tenía ganas de sacar conversación con ellos.
Al crecer y ser más inteligente por mi misma a lo largo de todo el colegio tenía unos profesores y profesoras buenísimos, en algunos momentos he cogido amistad con dos profesores que nunca me voy a olvidar de ellos el resto de mi vida, cuyas esas asignaturas son las que más me gustaba: Religión, Apoyo de Lengua y Apoyo de Matemáticas.
Entre los cursos de 2º, 3º ,4º, 5º y 6º de primaria conseguí tener muchas más amigas de la cuenta, aunque en un curso tuve una pequeña pelea con una niña, pero preferiría no contarlo.
Hicimos también muchas excursiones que me lo pase muy bien como por ejemplo: La Mezquita de Córdoba, Granada, estuvimos en un zoológico y en un paseo de caballos.
Al entrar en el instituto a los 14 años no tenía nada que ver al colegio, era grande y precioso pero cuando conocí a más gente y sobre todo a mi tutor o tutora correspondiente o también a profesor@ de allí no tenía ganas de seguir, poco a poco también tengo acnédotas de los jefes de estudios que había, que anteriormente uno de ellos era muy simpático conmigo, maestros y maestras que tampoco los olvidaré: Nicolás, Chary, Ascen, Angustia, Manuel, Sergio, Joaquín y Carlos.
En el instituto tuve más peleas de la cuenta y son demasiado fuerte para contarlo. En estas dos etapas he trabajado duro atendiendo en clase, en los estudios y al hacer los deberes, la verdad es que me costaba mucho aprovechar las horas de estudio. Antes teníados recompensas de aprender muchas cosas y tener mucho más amigos, ese día no me lo creía ni yo.
Y por último la universidad, el día de la entrevista estuve muy nerviosa por que no sabía como me iba a salir, más o menos me controlé y pude decir todo lo que se me vino de la cabeza, al acabar lo hice bien, otro día antes de las clases tuvimos una reunión con todos mis compañeros con sus familiares, nos dieron una tablet para que hagamos cosas importantes con ella y ya desde que estuvimos en nuestra clase nos dijeron que ibamos a tener dos profesores de apoyo, ya que son muy buena gente.
Desde luego que en la universidad voy teniendo mucha confianza con mis compañeros nuevos y son como una familia para mi.